Espectáculos y novedades en el recinto
El domingo 2 de febrero, a pesar de la incertidumbre reinante con relación al futuro de la gestión de la Exposición Iberoamericana, hubo actividad y algunas novedades en el recinto del certamen, en especial en el Sector Sur. La entrada al Parque de Atracciones, que desde las tres de tarde hasta las once de la noche estaría abierto y en pleno funcionamiento, era gratuita para quienes accedieran por la puerta de la avenida de la Raza y por la de la avenida de Moliní, aunque por la de la avenida Reina Victoria (la actual Palmera), el billete, que incluía la entrada al recinto, costaba 50 céntimos. Una vez más, se procuraba estimular la concurrencia al parque y el disfrute de sus atracciones, entre las que destacaban la Montaña Rusa (la mayor de Europa), la pintoresca Ría Misteriosa, sus dos pistas de automóviles, el Látigo, el Palacio de los Milagros, el Palacio de la Risa, el Wate Chut, el Diabolic y el Mont-Blanc-Metrópoli.
Por la tarde, en la Sala de Espectáculos de las Galerías Americanas se celebró una velada con participación de músicos vascos; por la noche, se reinauguró el nuevo Cabaret Hispano Marroquí y en el Teatro de la Exposición se estrenó una nueva obra.
Por la mañana, la tradicional misa
A las doce de la mañana, en el Pabellón de Castilla la Vieja y León se celebró la misa en memoria de los iniciadores y creadores de la Exposición ya fallecidos. Aquel día, la ceremonia fue oficiada por el ilustre leonés doctor Moisés Díaz Caneja, canónigo lectoral de la diócesis de Astorga, y miembro de la familia del gobernador civil de la provincia, Vicente Mora Arenas, que asistió a la ceremonia. Terminada esta, Díaz Caneja y Mora Arenas visitaron detenidamente el pabellón. Entre los familiares de los fallecidos estuvieron la viuda de Rodríguez Caso e hijos, el hijo de Aníbal González, Ana María Silva de Fernández y representantes de las casas de Colombí, Urbina y Luca de Tena.
Por la tarde, un concierto en honor de la colonia vasco-navarra en Sevilla
A las seis de la tarde, en la Sala de Espectáculos de las Galerías Americanas de la avenida de la Raza, aprovechando la estancia en la ciudad del tenor vasco Ramón Laborda, que había tomado parte en la novena a Nuestro Padre Jesús de la Pasión, la Casa Eleizgaray organizó un concierto de canto, órgano y piano, en honor de la colonia vasco-navarra en Sevilla, en el que el actuaron Laborda, acompañado por dos músicos residentes en la ciudad; al órgano, Norberto Almandoz Mendizabal (1893-1970), sacerdote, compositor, crítico musical y organista, a la sazón el primero de la Catedral de Sevilla, y, al piano, de Juan Tellería Arrizabalaga (1895-1949). El programa incluía Adiós a la vida, de Tosca de Puccini, Raconto, de la ópera Lohengrín de Wagner, Neli ore de la ópera Otelo de Verdi, canciones vascas y una plegaria con letra de los hermanos Álvarez Quintero y música del maestro E. Ramírez. A petición del público, y como broche final, se interpretó el Benigne del Miserere de Eslava, con su tradicional do de pecho al final, que fue aclamado por el público.
Programa del concierto
Las entradas para asistir al acto, que tuvo fines benéficos, se vendieron en la Librería del Salvador, Plaza del Salvador, 23, en el Centro Vasco-Navarro y en la taquilla de la sala. Aunque estaba prevista la asistencia de los infantes don Carlos y doña Luisa y de sus hijos, estos no pudieron asistir por la indisposición de una de sus hijas.
La noche en el recinto
La inauguración del Cabaret Hispano Marroquí
Aquella noche, en el Barrio Moro se reinauguró el Cabaret Hispano-Marroquí. El establecimiento, muy lujoso y según la prensa “lo más original, lo más raro”, constaba además del salón de cabaret, de uno de café, otro de restaurante y dependencias anexas para cocina y servicios. Acababa de ser reformado a raíz de que la empresa de Eduardo Córdoba Vázquez se hiciera cargo del negocio, a quien Enrique Vázquez, contratista y principal acreedor del Barrio Moro, lo había arrendado.
En el Teatro de la Exposición
Aquel día, en el Teatro de la Exposición, con muy escaso público, la Compañía de zarzuelas, operetas y revistas del Teatro Reina Victoria de Madrid, en sesiones de seis y media y diez y cuarto, estrenó El príncipe Cri Cri, una revista en quince cuadros y tres actos, con libreto de José Juan Cadenas y música del maestro José Serrano.
Aunque la crónica del estreno valoró el vestuario y los lujosos y "conseguidos" decorados criticó la actuación, indicando la obra estaba poco ensayada y que el montaje había sido precipitado.
Noticias de la prensa local sobre la jornada
La misa en el pabellón castellano leonés. En El Noticiero Sevillano, de Sevilla. 4 de febrero de 1930, p. 8.
Un concierto del tenor señor Laborda. En El Correo de Andalucía, de Sevilla. 31 de enero de 1930, p. 6.
El concierto del tenor señor Laborda. En El Correo de Andalucía, de Sevilla. 1 de febrero de 1930, p. 5.
El concierto de canto, órgano y piano. En El Correo de Andalucía, de Sevilla. 4 de febrero de 1930, p. 6.
Cabaret Hispano-Marroquí (esquela). En El Noticiero Sevillano, de Sevilla. 1 de febrero de 1930, p. 5.
Acta de la sesión de la Comisión Permanente del 15 de febrero de 1930. A.M.S. Sección XVIII. Rollo 627, libro 8, fotogramas 611 a 613.
Programa de la Exposición del día. En El Noticiero Sevillano, de Sevilla. 2 de febrero de 1930, p. 5.
Programa de la Exposición del día. En El Noticiero Sevillano, de Sevilla. 1 de febrero de 1930, p. 5.
Espectáculos. Teatro Exposición. En El Noticiero Sevillano, de Sevilla. 4 de febrero de 1930, p. 3.
Cómo citar esta entrada
2 de febrero de 1930. Espectáculos y novedades en el recinto. En El Diario de la Exposición, de Juan José Cabrero Nieves y Amparo Graciani, https://www.eldiariodelaexposicion.com/post/2-de-febrero-de-1930. Sujeto a Licencia Creative Commons.
